SONDAS DE ALTA TEMPERATURA
En la industria química y refinerías, a menudo es necesario comprobar el grosor de la pared de los componentes de la planta, que pueden alcanzar temperaturas de 60 ° C a 550 ° C y no pueden enfriarse durante la medición de la corrosión.
La temperatura también es uno de los factores que acelera el proceso de corrosión, por lo que la medición debe realizarse con mayor frecuencia, en comparación con objetos más fríos. Muchas refinerías y plantas químicas llevan a cabo controles puntuales regulares del espesor de pared restante para evaluar adecuadamente la tasa de corrosión y predecir los reemplazos necesarios. Por lo general, estas mediciones se realizan de forma manual, utilizando equipos especialmente diseñados y técnicas de prueba modificadas.
Nuestro palpador TS5H, permite un rango de trabajo de hasta 550 ᵒC, con alta precisión y estabilidad en las medidas.
